Frases celebres de Sancho Panza

Frases celebres de sancho panza a don quijote

«El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha», escrito por Miguel de Cervantes Saavedra, es una obra cumbre de la literatura universal. Publicada en el siglo XVII, esta novela no solo satiriza los libros de caballerías de la época, sino que también ofrece una profunda reflexión sobre la naturaleza humana, la realidad y la locura. La relación entre Don Quijote y su escudero, Sancho Panza, es central en la narrativa, representando el contraste entre el idealismo y el pragmatismo. Sancho, con su sabiduría popular y su uso constante de refranes, aporta una perspectiva terrenal que complementa y contrasta con las aspiraciones elevadas de su amo. Estos refranes no solo enriquecen la caracterización de Sancho, sino que también reflejan la rica tradición oral y cultural de España.

Lista de frases y refranes de Sancho Panza

A continuación, se presentan algunos de los dichos de Sancho Panza más notables dirigidos a Don Quijote:

Al buen callar llaman Sancho

Allá va Sancho con su rocín

Ándeme yo caliente, ríase la gente

Bien se está San pedro en Roma; quiero decir, que bien se está cada uno usando el oficio para que fue nacido

Cuando a Roma fueres, haz como vieres

Da de comer al que ha sed y de beber al que ha hambre

De noche todos los gatos son pardos

Donde una puerta se cierra otra se abre

Dos linajes solos hay en el mundo, como decía una agüela mía, que son el tener y el no tener

Donde se piensa que hay tocinos, no hay estacas

Humilde con los soberbios y arrogante con los humildes

Ni perder derechos, ni llevar cohechos

No con quien naces, sino con quien paces

Por mal que le venga no se enoje

Quien bien tiene y mal escote, por bien que se enoja no se venga

—Y mira, Sancho, cómo hablas, y ten cuenta de no encajar algún refrán de los tuyos en tu embajada.

—¡Hallado os le habéis al encajador! —respondió Sancho—. ¡A mí con eso! ¡Sí, que no es ésta la primera vez que he llevado embajadas a altas y crecidas señoras en esta vida!

—Si no fue la que llevaste a la señora Dulcinea —replicó don Quijote—, yo no sé que hayas llevado otra, a lo menos en mi poder.

—Así es verdad —respondió Sancho—; pero al buen pagador no le duelen prendas, y en casa llena presto se guisa la cena, quiero decir que a mí no hay que decirme ni advertirme de nada, que para todo tengo y de todo se me alcanza un poco.

—También, Sancho, no has de mezclar en tus pláticas la muchedumbre de refranes que sueles; que puesto que los refranes son sentencias breves, muchas veces los traes tan por los cabellos, que más parecen disparates que sentencias.

—Eso Dios lo puede remediar —respondió Sancho—, porque sé más refranes que un libro, y viénenseme tantos juntos a la boca cuando hablo, que riñen por salir unos con otros; pero la lengua va arrojando los primeros que encuentra, aunque no vengan a pelo. Mas yo tendré cuenta de aquí adelante de decir los que convengan a la gravedad de mi cargo, que en casa llena presto se guisa la cena, y quien destaja no baraja, y a buen salvo está el que repica, y el dar y el tener seso ha menester.

—¡Eso sí, Sancho! —dijo don Quijote—. ¡Encaja, ensarta, enhila refranes, que nadie te va a la mano! ¡Castígame mi madre, y yo trómpogelas! Estoyte diciendo que escuses refranes, y en un instante has echado aquí una letanía dellos que así cuadran con lo que vamos tratando como por los cerros de Úbeda. Mira, Sancho, no te digo yo que parece mal un refrán traído a propósito; pero cargar y ensartar refranes a troche moche hace la plática desmayada y baja

—Y siendo yo gobernador, que es más que ser alcalde, ¡llegaos, que la dejan ver! No, sino popen y calóñenme, que vendrán por lana y volverán trasquilados, y a quien Dios quiere bien, la casa le sabe, y las necedades del rico por sentencias pasan en el mundo, y siéndolo yo, siendo gobernador y juntamente liberal, como lo pienso ser, no habrá falta que se me parezca. No, sino haceos miel, y paparos han moscas; tanto vales cuanto tienes, decía mi agüela, y del hombre arraigado no te verás vengado.

—¡Oh, maldito seas de Dios, Sancho! —dijo a esta sazón don Quijote—. ¡Sesenta mil satanases te lleven a ti y a tus refranes! Una hora ha que los estás ensartando y dándome con cada uno tragos de tormento. Yo te aseguro que estos refranes te han de llevar un día a la horca, por ellos te han de quitar el gobierno tus vasallos o ha de haber entre ellos comunidades. Dime, ¿dónde los hallas, ignorante, o cómo los aplicas, mentecato? Que para decir yo uno y aplicarle bien, sudo y trabajo como si cavase.

—Por Dios, señor nuestro amo —replicó Sancho—, que vuesa merced se queja de muy pocas cosas. ¿A qué diablos se pudre de que yo me sirva de mi hacienda, que ninguna otra tengo, ni otro caudal alguno, sino refranes y más refranes? Y ahora se me ofrecen cuatro que venían aquí pintiparados, o como peras en tabaque, pero no los diré, porque al buen callar llaman Sancho

Citas sobre Sancho

«Difícil es hablar a los Sanchos, nacidos y criados en lugares donde sólo se oyen comadrerías de solana y sermones, pero más difícil aún es hablar a bachilleres». Miguel de Unamuno

«Me gusta mucho la literatura de Miguel de Cervantes, pero he de reconocer que simpatizo más con la figura de Sancho Panza». Raisa Gorbachova

«Pero tú, Sancho Pueblo pronuncias anchas sílabas, permanentes palabras que no lleva el viento…». Blas de Otero

«Por La Mancha Sancho se aquijota y don Quijote se ensancha». Gloria Fuertes

«Sancho es el lazarillo de su amo ciego; le advierte de las realidades más evidentes, que don Quijote niega porque no las ve. No las verá hasta su lecho de muerte. Muerte necesaria para dejar sitio a otra época». Max Aub

«Sancho Panza es un intelectual analfabeto». Gonzalo Torrente Ballester

«Si examinas a tu propia mente, ¿cuál eres, don Quixote o Sancho Panza? Con casi toda seguridad eres ambos. Hay una parte de ti que desea ser un héroe o un santo, pero otra parte de ti es un pequeño hombre gordo que ve claramente las ventajas de mantenerse con vida y con el pellejo intacto. Él es tu ser no oficial, la voz de las tripas protestando frente al alma. Sus gustos tienden hacia su propia seguridad, las camas blandas, el no trabajar, jarras de cerveza y mujeres con figuras ‘voluptuosas’. Es él quien hace estallar a tus altos ideales y quien te insta a cuidar al Número Uno, a ser infiel a tu esposa, a eludir tus deudas, y todo lo demás. Otra cosa es que tú te permites dejarte influir por él o no». George Orwell

Los refranes y citas de Sancho Panza han trascendido el tiempo debido a su universalidad y conexión con la experiencia humana cotidiana. Estas expresiones encapsulan verdades y consejos prácticos que resuenan en diversas culturas y épocas. La habilidad de Cervantes para integrar la sabiduría popular en la narrativa de «Don Quijote» no solo enriquece la obra literaria, sino que también preserva y celebra la tradición oral española. La interacción entre Don Quijote y Sancho Panza, mediada por estos refranes, ofrece una dualidad entre el idealismo y el realismo, proporcionando una visión equilibrada de la condición humana.

Te invitamos a reflexionar sobre cuál de los refranes de Sancho Panza resuena más contigo y por qué. Comparte tu frase favorita y tus pensamientos al respecto.

Califica este artículo
elbuholector.net
Añadir comentarios

;-) :| :x :twisted: :smile: :shock: :sad: :roll: :razz: :oops: :o :mrgreen: :lol: :idea: :grin: :evil: :cry: :cool: :arrow: :???: :?: :!: